"YO HAGO NUEVAS TODAS LAS COSAS" (Ap.21,5)

El Reino de Dios no se sostiene con parches, sino que requiere conversión total del corazón.

La pregunta sobre el ayuno

14. Entonces se le acercaron los discípulos de Juan y le preguntaron: 'Nosotros y los fariseos ayunamos en muchas ocasiones, ¿por qué tus discípulos no ayunan?'

15. Jesús les contestó: '¿Quieren ustedes que los compañeros del novio estén de duelo mientras el novio está con ellos? Llegará el tiempo en que el novio les será quitado;entonces ayunarán.

16. Nadie remienda un vestido viejo con un pedazo de tela nueva, porque el pedazo nuevo tiraría del vestido y la rotura se haría mayor.

17. Y nadie echa vino nuevo en recipientes de cuero viejos, porque si lo hacen, se reventarán los cueros, el vino se desparramará y los recipientes se estropearán. El vino nuevo se echa en cueros nuevos, y así se conservan bien el vino y los recipientes.

Mt.9,14-17

La lectura nos recuerda hoy que Jesucristo es el Hombre Nuevo, el que renueva todo lo caduco que se ha ido pegando a la humanidad a lo largo de los siglos. Es fácil caer en observancia de las cosas externas y olvidamos el llamado de Dios a la plenitud, a la integridad, a la alegría. No es cuestión de remendar, parchar mi vida, sino más bien estar dispuesto para ser hecho de nuevo..."Nacer de nuevo" ¡Buenos días en el Señor!