Invitación a cambiar.

Porque el Evangelio es cambio permanente.

Señor, en tu nombre hoy me revisto con tu armadura; me ciño con el cinturón de la verdad; me pongo al pecho, muy cerca del corazón, la coraza de la justicia; me calzo para no esperar sino llevar tu mensaje con el calzado del celo por anunciar el Evangelio de la paz; me protejo con el escudo de la fe para apagar las flechas incendiarias del enemigo malo; me pongo el casco de la salvación para tener siempre en mi mente lo que Jesús ganó por mí en la cruz y empuño la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios, para defenderme y atacar a la hora de la tentación y la prueba.

Evangelio

Lucas 13, 31-35

En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos fariseos y le dijeron: "Vete de aquí, porque Herodes quiere matarte".

Él les contestó: "Vayan a decirle a ese zorro que seguiré expulsando demonios y haciendo curaciones hoy y mañana, y que al tercer día terminaré mi obra. Sin embargo, hoy, mañana y pasado mañana tengo que seguir mi camino, porque no conviene que un profeta muera fuera de Jerusalén.

¡Jerusalén, Jerusalén, que matas y apedreas a los profetas que Dios te envía! ¡Cuántas veces he querido reunir a tus hijos, como la gallina reúne a sus pollitos bajo las alas, pero tú no has querido!

Así pues, la casa de ustedes quedará abandonada. Yo les digo que no me volverán a ver hasta el día en que digan: '¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!".

Reflexión

Cuántas veces ‘dice Jesú’ quise acogerte como la gallina acoge a sus pollitos y no quisiste.

Cuántas veces el Señor, nos ha invitado a cambiar de una manera más radical nuestra vida a través de un retiro, de un amigo o de una amiga, de una lectura, de una homilía, incluso de un bello atardecer, y cuántas veces le hemos dicho: "Hoy no Señor, quizás mañana", para lo mismo decirle la próxima vez.

El Señor no se cansa de llamarnos a vivir en su amor, ¿no será ya tiempo de aceptar su invitación y entregarle totalmente nuestra vida?.

Actio

Hoy revisaré que tan revestido he permanecido en mi vida con esta armadura de Dios.

Oración Final

Dios mío voy a hacer todas mis acciones por vuestro santo y divino amor. En el Nombre del Padre, y Del Hijo y del Espíritu Santo Amén.

UEMBB
REFLEXIÓN DEL DÍA UEMBB.

ORACIÓN:

¡Oh alto y glorioso Dios!
ilumina las tinieblas de mi corazón.
y dame fe recta,
esperanza cierta y caridad perfecta,
sentido y conocimiento, Señor,
para que cumpla tu santo y veraz mandamiento.

Nosotros 

somos.