Haces nuevas las cosas!

Señor, Dios y Padre nuestro, miramos con profundidad tu Palabra poderosa y vemos la gloria del nuevo mundo que crearás de acuerdo a tu justicia y verdad. Te damos las gracias por darnos esta alegría en medio de todo nuestro trabajo y lucha aquí en la tierra. Miramos profundamente en tu Palabra. Tú haces nuevas todas las cosas.

Un día en que Jesús, acompañado de sus discípulos, había ido a un lugar solitario para orar, les preguntó: “¿Quién dice la gente que soy yo?” Ellos contestaron: “Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, que Elías; y otros, que alguno de los antiguos profetas, que ha resucitado”.
 
Él les dijo: “Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?” Respondió Pedro: “El Mesías de Dios”. Entonces Jesús les ordenó severamente que no lo dijeran a nadie.
 
Después les dijo: “Es necesario que el Hijo del hombre sufra mucho, que sea rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, que sea entregado a la muerte y que resucite al tercer día”. Lucas 9, 18-22

¡La obra de arte que estamos viendo hoy fue pintada por una niña de ocho años! Akiane Kramarik nació en 1994 de madre lituana y padre católico americano. Es una pintora autodidacta y vendió el cuadro actual por 10.000 dólares después de terminarlo, que acaparó los titulares de la prensa mundial. En diciembre de 2019, la familia de Akiane recuperó el Príncipe de la Paz y lo vendió a un coleccionista privado por 850.000 dólares.

En la lectura del Evangelio de hoy, el propio Jesús plantea la pregunta a sus discípulos y a nosotros: ¿Quién dice la gente que soy? Es una pregunta muy personal para cada uno de nosotros, tratando de pensar quién es Él para nosotros. Es una pregunta que necesita ser respondida de una manera muy personal, más que de una manera intelectual. ¿Es Él mi padre, mi amigo, mi maestro, mi juez... o una combinación de estos?

By Patrick van der Vorst y Br Juan Carlos Arias Bonet, LC